Consejos para que la vuelta al trabajo no sea una pesadilla

Volver a poner la alarma del móvil, abrir la bandeja de entrada del correo y encontrar cientos de mensajes sin leer, una lista infinita de tareas por hacer… son los signos inequívocos de la vuelta al trabajo tras las vacaciones de verano.

Que el síndrome postvacacional no es un mito es algo en lo que todos los expertos coinciden y cuyos efectos conviene no subestimar.

La vuelta al trabajo puede provocar estrés y ansiedad y como consecuencia baja productividad y desmotivación. Por eso es importante tener en cuenta que durante los primeros días el ritmo debe recuperarse paulatinamente y las empresas deben propiciar que el ambiente laboral sea el más positivo y motivador posible.

Estos son algunos consejos que pueden hacer más llevadera la vuelta al trabajo:

-COMIENZO SUAVE. No es lo mismo empezar un lunes que un miércoles. Si tu empresa u organización lo permite, empezar a mitad de semana puede hacer mucho menos duro un comienzo que si lo haces con una semana completa por delante.

-DESCANSOS. No intentes llegar y trabajar cinco horas del tirón. Hacer descansos y pausas de pocos minutos puede ayudarte a rebajar la tensión y a continuar. Un café o una pequeña charla con los compañeros te vendrán bien en mitad de la jornada.

-PLANIFICA LA VUELTA. Agenda las tareas a realizar priorizando lo más importante. Solo así podrás evitar la sensación de agobio por la carga de trabajo acumulada. Programa tu trabajo con metas y objetivos realistas y recuerda que las listas siempre son buenas aliadas en momentos de estrés.

-HÁBITOS SALUDABLES. En vacaciones comemos peor y dormimos menos, nuestras rutinas se relajan y llevamos una vida más desordenada. Por eso es importante que lleves hábitos de vida saludable. Cuidado con los alimentos ricos en azúcares y las comidas copiosas. La vuelta al trabajo es el momento perfecto para retomar el ejercicio físico y la buena alimentación. Si es unos días antes de la vuelta, mejor, nuestros cuerpo estará más acostumbrado.

-NO OBSESIONARSE. La vuelta es dura y pone fin a un período de desconexión y descanso necesario, pero también es corta y, como mucho, en una semana ha pasado. Si después de dos semanas el síndrome no es historia, quizá deberías plantearte cambiar de trabajo. En ese caso, podemos ayudarte y deberías inscribirte en nuestra página.

En definitiva y como recomendación general, es importante poner el foco en lo positivo, peor sería no tener un trabajo al que volver. Si es así, no dejes de inscribirte en nuestra página (aquí) para encontrarlo.

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